Seamos sinceros todos amamos los macarrones, los colores, el sabor y esa sensación al morderlos…es una combinación entre galleta y merengue  hecho de clara de huevo, polvo de almendra, azúcar glas y azúcar; su origen es italiano y viene del término ‘macaron’ o ‘macarrón’ deriva de la palabra maccarone, surgen en el siglo XVI como dulces cúpulas merengadas de base plana, pronto los franceses adoptan la receta y rápidamente ganan su popularidad, a finales del siglo XIX comienzan a unirse de a dos, con un delicioso relleno, justo como los conocemos hoy.

¿Por qué son tan llamativos? ¡Simple! Tienen un delicioso y delicado sabor, su aspecto, es visualmente muy atractivo y además, se puede ser muy creativo en cuanto a combinaciones de colores y sabores. Un macarrón perfecto, debe tener una superficie ligeramente crujiente, que da paso a una delicada sensación cremosa y un poco chiclosa cuando se llega al centro.En estas épocas se pueden encontrar en una increíble variedad de colores, pasando de las tradicionales tonalidades pastel, a colores más terrosos, metalizados o puros, siempre acompañando de manera armónica su sabor, donde se abren otra infinidad de posibilidades.

Sin duda un macarrón es un detalle que sirve para vestir elegantemente mesas y deleitar a invitados en bodas, cumpleaños, bautizos, y cualquier evento distinguido y sofisticado, aunque en Cocol lo recomendamos simplemente si tienes antojo o también para adornar un pastel. ¡Siempre serán de nuestros favoritos!